Bla, Bla y Bla

1 08 2008

Mientras su amiga no hacía más que hablar y requetehablar de cientos de millones de estupideces, una detrás de otra y sin pausa ni si quiera para respirar, ella se imaginaba flotando en mitad del océano, sintiendo como la corriente le arrastraba hacia una playa, virgen, de una isla paradisíaca, donde viviría muy feliz el resto de sus días.

© Richard Archer – 2008 (Todos los derechos reservados)


Acciones

Information

Deja un comentario